Están Moisés, Jesús y un viejecito jugando al Golf.
Sale Moisés, y la bola se le va al agua. Se acerca al lago, hace que las aguas se abran, golpea, y hoyo en dos golpes.
Le toca a Jesús. Golpea, y la bola se va al agua. Pero, en vez de hundirse, flota. Se acerca Jesús andando por el agua, golpea, y hoyo en dos golpes.
Por ultimo le toca al viejecito. Golpea, y la pelota va al agua; pero justo antes de caer, sale un pez y coge la bola. Antes de que vuelva el pez al agua una gaviota coge el pez y se lo lleva volando. Aparece de repente un halcón, que asusta a la gaviota que en consecuencia suelta al pez, el cual a su vez escupe la bola, la cual describe una parábola que la lleva directamente al agujero, y hoyo en uno.
Y dice Jesús,
-Mira, Papá... Si empiezas a vacilar lo dejamos ¿eh?
6 comentarios:
jajaja, qué bueno.
Eres tremenda Ana.
Narci
Es que me encanta reírme, mi niña, y este chiste me hizo una gracia tremenda, estuve un gran rato riéndome.
Risas y besos
Recuerda las historias increíbles de los evangelios apócrifos, o algún cuento sufita.
También hacen reir, a veces.
P?ues si, aunque cuentos sufistas no he leído.
Siempre que hagan reír será bueno.
Más besos
Gracias, Anais, por el sol de las Islas.
Ha salido, el sol, un rato por aquí, y bien que alegra.
En el sentido físico, y en el metafórico.
Cuento Sufita: Buscando la llave
Muy tarde por la noche Nasrudin se encuentra dando vueltas alrededor de una farola, mirando hacia abajo. Pasa por allí un vecino.
- ¿Qué estás haciendo Nasrudín, has perdido alguna cosa?- le pregunta.
- Sí, estoy buscando mi llave.
El vecino se queda con él para ayudarle a buscar. Después de un rato, pasa una vecina.
-¿Qué estáis haciendo? - les pregunta.
- Estamos buscando la llave de Nasrudín.
Ella también quiere ayudarlos y se pone a buscar.
Luego, otro vecino se une a ellos. Juntos buscan y buscan y buscan. Habiendo buscado durante un largo rato acaban por cansarse. Un vecino pregunta:
- Nasrudín, hemos buscado tu llave durante mucho tiempo, ¿estás seguro de haberla perdido en este lugar?
- No, dice Nasrudín
- ¿dónde la perdiste, pues?
- Allí, en mi casa.
- Entonces, ¿por qué la estamos buscando aquí?
- Pues porque aquí hay más luz y mi casa está muy oscura.
Espero que te haga sonreir, o alegrar.
Y meditar también, por qué no..
Te deseo, y me deseo, risas y besos.
Juan.
Qúe bueno, Juan. Sí que me hiciste reír y tiene su trascendencia.
Gracias por tu amabilidad.
Besos con llave
Publicar un comentario